La piedra de los comienzos. Ayuda en la toma de decisiones y aumenta la intuición.
 
Piedra de la mujer por excelencia.
 
La dificultad de encontrar la piedra de luna hace que sea aún más especial y apreciada. Hay quienes le atribuyen propiedades mágicas, e incluso la consideran un talismán.
 
La variedad naranja a marrón tiene una relación con el arraigo y el anclaje muy útil para las personas que, justamente, están demasiado en la luna de Valencia.
Una de las más relevantes es la fertilidad y la ayuda para tener un buen parto. Está ligada a lo femenino. Además, se cree que atrae el amor y la buena suerte, protege a los viajeros, libera las malas energías, protege sobre el deseo y los malos pensamientos y ayuda a encontrar el equilibrio en todos los ámbitos de la vida.
 
Este mineral se vincula con el equilibrio del sistema hormonal, aportando estabilidad y beneficios a las diferentes etapas que sufre el cuerpo.
 
La piedra de luna, además de impulsar el deseo sexual y de mejorar las relaciones amorosas, tiene beneficios sobre la salud de la mujer: puede ser utilizada para aliviar los dolores menstruales, para mejorar problemas de lactancia, para equilibrar las hormonas femeninas y las emociones y fortalecer la inspiración.